Este domingo repetimos salida recreativa por el río Donsal, una de las rutas más bonitas existentes en el municipio de Becerreá, dentro del espacio natural de los Ancares.
Desde muy temprano, nos dispusimos a disfrutar de la misma, con nuestros inseparables bastones, decididos a descubrir el paisaje con la mirada del asombro y admiración.
Sin lugar a ninguna duda, nos encontramos ante un paisaje repleto de colores, olores, sonidos, belleza...en definitiva, de vida. La bajada por la ladera nos va despertando esos sentidos y a medida que avanzamos, la naturaleza nos regala su variada vegetación autóctona de castaños centenarios, robles, cerezos, abedules, fresnos... Una parada obligatoria es la catarata de Sevane, en donde la fuerza del agua y su entorno provocan una inmensa emoción.
Desde aquí, recomendar la realización de esta ruta a todos los walkers, senderistas y caminantes tanto por su limpieza como por su perfecta señalización. Nuestro agradecimiento a la asociación Castaño y Nogal por su gran labor de recuperación y dinamización de esta zona, de gran riqueza ecológica, etnográfica y paisajística enmarcada dentro del espacio natural de la Reserva de la biosfera de los Ancares Lucenses y Montes de Cervantes, Becerreá y Navia.
Cada día, el camino nos ofrece sensaciones únicas e irrepetibles. Las sendas, a cada paso, se transforman y nos aportan esa energía vital que, recibida desde los pies, recorren nuestro cuerpo aportando ese bienestar que solo el Nordic Walking nos puede dar.
Texto de M.S.
Háblame aquí por WhatsApp 